Desde las frías tierras ucranianas la gente de Xtreem Music nos trae la última obra de este combo de puro brutal death en una onda 100% americana, siguiendo el camino abierto por Incantation, Immolation y demás luminarias del género.
Este Denial of the Scriptures se trata de su 5º álbum completo desde su formación en el año 2000. Tienen publicados, además, dos EPs y otras dos demos. No obstante, he de decir que para mí eran totalmente desconocidos hasta que escuché el adelanto, Inception of Incursion, que llamó poderosamente mi atención.
Con una soberbia presentación (la portada me parece simplemente espectacular), a lo largo de casi 40 minutos desgranan 10 temas (9 propios y una versión de Pyaemia que hacen totalmente suya), más que suficientes para dejar completamente asfixiado al oyente.
Con una soberbia presentación (la portada me parece simplemente espectacular), a lo largo de casi 40 minutos desgranan 10 temas (9 propios y una versión de Pyaemia que hacen totalmente suya), más que suficientes para dejar completamente asfixiado al oyente.
El álbum goza de una producción nítida y cristalina, en el que no pesan la velocidad supersónica de la batería ni la pesadez de las guitarras para que cada instrumento se aprecie perfectamente. Habrá quien prefiera ese sonido sucio de los primeros discos de Incantation, por ejemplo, pero a mí estas producciones limpias me gustan, siempre que no caigan en la sobreproducción y acaben sonando demasiado sintéticas (o mejor dicho, a plástico).
De la música poco que añadir. Los referentes de Fleshgore están claros: Immolation, Deeds of Flesh, Incantation o Hate Eternal son las influencias principales. Así, el disco apenas concede un par de segundos de respiro, entrando a matar desde el primer minuto. Nada de ritmos lentos y pesados, todos los temas alternan entre blast beats brutales y secciones de doble bombo desbocado. No se regodean en exquisiteces técnicas (más allá de la impresionante calidad que hay que tener para tocar a semejantes velocidades), no obstante a lo largo del disco, y repartidas entre los distintos temas, podemos encontrar varias pinceladas técnicas, sobre todo en algún riff de guitarra y algún break de batería. Quizá, por buscar algún pero, la voz peca de lineal, ya que durante todo el álbum se mueve en el mismo tono ultragutural. Un contrapunto en forma de voz chillona (a lo Aborted, sin ir más lejos) hubiera enriquecido muchísimo los temas.
Destacan Talk me About God, New Ordeal Comes Into the World, Forgotten Knowledge y el tema título, Denial of the Scriptures, aunque en general todas las canciones mantienen un buen nivel y no se aprecia que ninguna sea de relleno.
Un buen álbum, sin duda, que hará las delicias de los aficionados al brutal death más salvaje!
Un buen álbum, sin duda, que hará las delicias de los aficionados al brutal death más salvaje!
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